Actualmente, la sociedad, gracias en parte a las redes sociales, tiende al compromiso con la salud individual y de la gente que tiene cerca de ellos. Por suerte, una de las principales vertientes para cuidar la salud es la alimentación mediante comidas saludables. Ya sea por imagen, moda o preocupación legítima, cualquier gesto que nos acerque hacia una vida llena de hábitos saludables es bienvenido.
La mayoría de los clientes que nos encontremos en nuestro negocio, tuvieron, tienen o tendrán algún contacto con la filosofía de vida sana. Cuando salen a comer, quieren seguir manteniendo el compromiso con ellos mismos de seguir una dieta y no saltarla por tener una reunión con amigos.
Algunos restaurantes han detectado esta necesidad por comer sano y han decidido darle una vuelta a la oferta gastronómica con comidas saludables que acompañen al cliente con su objetivo del día a día, estar sano.
¿Qué entendemos por comidas saludables?
Tenemos que tener muy claro que “saludable” no es necesariamente hipocalórico o “ligero”, y lo “natural” no es necesariamente sano. Para que una dieta sea saludable tiene que estar basada en las necesidades particulares de cada individuo: no tienen las mismas necesidades nutricionales, por ejemplo, un niño, un atleta y un adulto sedentario. Además, dentro de una dieta realmente saludable son tan importantes las grasas como las proteínas, sin olvidar el equilibrio entre hidratos de carbono y oligoelementos. Respetar al cliente en este aspecto no es tarea fácil y hay que entender qué es lo que funciona en este tipo de comidas. Esta pregunta nos lleva a replantearnos el concepto básico que toda la vida llevamos oyendo, “la verdura es importante”. La mayoría de restaurantes se han reinventado ofreciendo una alternativa en forma de ensaladas muy atractivas al cliente poniéndolas en el punto de mira de las comidas saludables.
“Pero… ¿Sólo podemos comer ensaladas?”
Ni mucho menos, evidentemente las ensaladas son la insignia de las comidas saludables y su parte de reconocimiento tienen, aun así, hay muchas alternativas igual de saludables que podemos escoger. Carne o pescado a la plancha o al vapor son una buena alternativa, un sinfín de variedades de arroces o legumbres, verduras braseadas, guisos, etc…
Podemos afirmar sin temor a equivocarnos que las cantidades, calidad biológica y nutricional de la materia prima junto a las técnicas de cocción, dibujan la silueta de una alimentación realmente sana.
“Me apetece una hamburguesa, ¿es comida saludable?”
Si y no, esta pregunta tiene cierto matices. Si bien es verdad que las hamburguesas se etiquetan como comida rápida, algunos restaurantes están demostrando que es una opción totalmente válida como comida saludable. Escoger buena carne, plantear una guarnición que no sean patatas fritas, que los añadidos a la hamburguesa sean saludables como verduras, quesos, el pan, etc.. todo esto hace que se pueda escoger como una alternativa a las ensaladas.
Conceptos que están funcionando en restaurantes
Enseñar las Kcal y los macronutrientes en la carta, ayuda a la transparencia del producto y el cliente está satisfecho porque entiende lo que come. Esta práctica es conocida en algunos restaurantes con centros deportivos cercanos que hacen la vida más fácil a los deportistas. En restaurantes de cierto nivel también se está haciendo esta opción cada vez más visible a los clientes.
Descripciones concretas en la carta, esto es un punto a favor para el cliente porque sabe exactamente qué es lo que va a degustar y le permitirá decantarse por un plato u otro dependiendo de su situación.
Platos sencillos y limpios sin mucho producto, un buen solomillo a la plancha o unas brochetas de verduras, son platos bastante atractivos para un público que busca comidas saludables.
Las salsas aparte, si es posible, puesto que la mayoría de clientes que buscan comida saludable agradecen que las salsas se las pongan a parte, debido a esto, en los platos ya se realiza un emplatado con todo a parte y que el cliente decida cuanta cantidad es lo que quiere consumir.
Un plato saludable como modelo de negocio, este es otro de los puntos fuertes que se potencian para vender comidas saludables. Por ejemplo, el humus, el tofu, las ensaladas hawaianas, son productos relativamente recientes y platos que atraen a este tipo de público para organizar reuniones con amigos.
¿Qué tipos de restaurantes son los elegidos para degustar comidas saludables?
La comida japonesa, es una de las más solicitadas para este tipo de cliente, son productos que cumplen con la regla del plato sencillo y limpio. El pescado es crudo, se usa arroz y la salsa de soja o el wasabi van a parte.
La comida hawaiana, como hemos mencionado anteriormente. Están de moda las ensaladas en bowls en este tipo de restaurantes ya que aportan cierta frescura y reinvención a un plato poco apetecible para una reunión con amigos.
La hamburguesería, cada vez más, este tipo de negocio tiende a demostrar que ellos también pueden tener comida saludable, enseñando mediante un emplatado el producto claro y unas opciones de guarnición acorde.
La comida vegana, muy versátil a la par que moderna, permite mantener el objetivo del cliente. Esta es la apuesta más segura a la hora de escoger restaurante si tienes dudas para salir.
La comida “casera”: muchos son los establecimientos que usan este reclamo para atraer a comensales cansados de los registros organolépticos comerciales y que quieren disfrutar de manera sencilla una comida rica, sana y más “humanizada”.
Como podemos ver, hay muchas opciones en cuanto a comida saludable, la corriente cada vez está más extendida y los clientes son más exigentes a la hora de saber qué es lo que están consumiendo. Por eso es importante ir añadiendo pequeños cambios a tu carta que puedan adaptarse a este nuevo tipo de cliente con mayor facilidad.
