Como viene siendo habitual, cada vez, el consumidor es más consciente del planeta y se tiende a prestar más atención a prácticas sostenibles como son los productos orgánicos.
La agricultura y ganadería modernas han multiplicado los impactos negativos sobre el medio natural. La destrucción y salinización del suelo, la contaminación por plaguicidas y fertilizantes, la deforestación o la pérdida de biodiversidad genética, todos ellos son problemas muy importantes a los que hay que hacer frente.
Por suerte, actualmente contamos con herramientas para solventar estos problemas y generar una producción sostenible mediante los productos ecológicos, bio y orgánicos. Pero, ¿por qué tantas etiquetas?, ¿no significan lo mismo?
Y en otro orden de ideas: ¿un producto ecológico traído desde el norte de Europa hasta España deja de serlo si sumamos la huella de carbono que se produce al transportarlo?
La normativa europea solo contempla los productos ecológicos, hemos sido nosotros, consumidores y empresas los que hemos definido un poco más que son cada uno de ellos.
Para poder clarificar cada uno de los conceptos en Repagas te traemos una pequeña guía de cómo diferenciarlos cuando realices la compra.
Sabiendo que los productos sostenibles ofrecen una solución al cliente y que al mismo tiempo ofrecen soluciones al medio en el que se producen tanto ecológico como social, vamos a determinar las bases para después entrar con los matices.
Productos Ecológicos
Los productos ecológicos son aquellos que nos permiten mantener una relación con el medio ambiente evitando el mayor impacto posible en la explotación agrícola, ganadera e industrial y se definen como todo aquel producto que cumpla las siguientes características:
- Emplean las mejores prácticas medioambientales.
- Consiguen preservar al máximo los recursos naturales.
- Aplican normas exigentes sobre bienestar animal y vegetal.
- Utilizan recursos renovables integrados en sistemas locales.
¿Cómo identificar los productos ecológicos?
La eurohoja o ecolabel son los logotipos que regulan la certificación a nivel europeo y que los productos que cumplan con los requisitos podrán usarla en los envases junto a la certificación de la comunidad autónoma correspondiente.
En España la agricultura y ganadería ecológica, y por ende los alimentos ecológicos, se controlan a través de los correspondientes Comités de Agricultura Ecológica de cada una de las CCAA, en algunas de ellas se aprobó una certificación privada y en la gran mayoría es pública, aquí te dejamos el listado completo.
¿A qué productos se les puede poner la certificación de producto ecológico?
No solo son los productos agrícolas en sí, también a los productos ganaderos como los huevos, la leche o la carne son productos que pueden tener certificado de productos ecológicos que permitan la sostenibilidad a largo plazo también productos industriales de muchos tipos pueden contener la etiqueta ecolabel que certifica de la misma forma a estos productos. Te dejamos el buscador de ecolabel por si tienes curiosidad sobre algún producto ecológico que uses en tu cocina.
Productos BIO
Son productos que no han sido manipulados genéticamente garantizando la conservación de las especies y la diversidad de las mismas.
Antiguamente mediante la selección manual del hombre y la selección natural por el entorno, la diversidad de la agricultura y ganadería era local. Actualmente y debido a la manipulación genética directa de algunas especies los productores de distintas partes del mundo han adoptado modificaciones que les benefician en la producción alterando la biodiversidad de la región. Es por eso que los productores que usan esta etiqueta bio hacen hincapié en las siguientes cualidades del producto.
- Llevan a cabo un proceso natural de selección de especies.
- Contribuyen a una mejora del patrimonio genético cerrando el ciclo reproductivo de las especies.
- Apoyan la preservación de un elevado nivel de biodiversidad.
Productos Orgánicos
Los productos orgánicos a diferencia de los productos ecológicos, son productos que contribuyen a mantener un completo ciclo totalmente local y con los recursos disponibles de la zona alterando lo menos posible el medio natural que les rodea.
Los productores que usan este etiquetado tienen en cuenta las siguientes características:
- Contribuyen a mantener y aumentar la fertilidad del suelo.
- Emplean la rotación de cultivos como forma natural de regeneración de los terrenos.
- Previenen la erosión del campo y la pérdida de biodiversidad en el subsuelo.
- Mantienen la pureza de los manantiales de aguas subterráneas.
En resumen, cualquiera de los anteriores certificados, productos ecológicos, bio u orgánicos, te garantizan una sostenibilidad de los productos a largo plazo conservando el medio ambiente y que realices una compra responsable. Otro factor a tener en cuenta son los productos “Kilómetro cero”, que favorecen a los productores locales a la par que se limitan las emisiones contaminantes a la atmósfera. Esto sin olvidar la promoción de estos productores, el respeto por la estacionalidad de las materias primas y la salvaguarda de las tradiciones gastronómicas locales.
De momento, el Parlamento Europeo sigue apostando por mejorar la calidad de los productos en la comunidad y sigue tomando medidas al respecto como por ejemplo, sabemos que en 2018 aprobó nuevas normativas que se aplicarán en 2021 y que ayudarán a clarificar más y mejor el sector obligando a las importaciones a cumplir con los estándares comunitarios y facilitar ayudas a pequeños agricultores y ganaderos que quieran garantizar la sostenibilidad de sus productos con el etiquetado de “productos ecológicos”. Pero para no aburriros os dejo los detalles en este enlace.